El once de la jornada 13 de LaLiga SmartBank

La decimotercera jornada de LaLiga SmartBank tuvo once protagonistas que a continuación detallamos. Destacó Borja Bastón (Oviedo) con un doblete, Sashoua (Tenerife) marcó uno y dio dos. Stuani (Girona) marcó para dar los tres puntos a su equipo en el 96′. Amir (Ponferradina) fue el mejor portero de la jornada.

La Ponferradina volvió a ganar tras seis jornadas de sequía. Y lo hizo gracias, entre otras cosas, a la buena actuación de Amir. El portero iraní fue un muro ante el Cartagena, con tres buenas paradas. A destacar una en la que palmeó a córner un disparo de Álex Gallar.

No es que Bogdan sea un jugador de marcar goles. De hecho, el último tanto en Liga fue con el Sporting B, hace tres años. Y cualquiera lo diría viendo la frialdad que mostró ante Lugo para, primero controlar dentro del área y después ponerla en la escuadra para salvar un punto ante el Lugo.

El Yamiq, al igual que Bogdan, basa más su trabajo en la defensa que en el ataque. Sin embargo, ante el Eibar se desquitó con un potentísimo remate de cabeza a la salida de un córner, para poner el 1-0 en el marcador contra el Eibar. El marroquí entró con todo.

Rubén estrenó su cuenta goleadora de la temporada a costa de un Alcorcón que se hunde en la tabla. El defensa cabeceó un balón a la salida de un córner que fue volando por encima de todos; y que, a pesar del palmeo de Dani Jiménez, terminó entrando en la portería.

Como decíamos antes, la Ponferradina acabó con su sequía de victorias ganando al Cartagena. Agus Medina fue el autor del único tanto y ¡Vaya tanto! Al catalán le llegó un balón en tres cuartos, avanzó y se sacó un latigazo con pierna derecha que se metió pegadita al palo izquierdo de la portería de Marc Martínez.

Roger Brugué saltó al campo en modo salvador. El jugador, cedido por el Levante, llevaba sólo nueve minutos en el terreno de juego cuando marcó el gol del empate en la Romareda. Estuvo rápido para aprovecharse de un rechace dentro del área y tras girarse, batir a Cristian Álvarez.

Chris Ramos marcó el momentáneo 1-0 contra el Lugo con un gol de pillo. Primero ganó la espalda a su defensor en un balón en profundidad; y después, la picó por encima de Mariño antes de marcar. Es su segundo gol de la temporada.

Se olía que Bermejo podría tener su día ante el Burgos. Avisó primero con un remate al larguero desde dentro del área y a la segunda no falló: regateó a trompicones a su par (todo hay que decirlo, de manera eficiente) y batió a Alfonso Herrero.

Quizá sorprenda la inclusión de Stuani en el once de esta jornada, pero lo cierto es que su gol, aunque poco vistoso, fue fundamental para su equipo. El uruguayo lleva dos jornadas seguidas anotando tantos in extremis que valen puntos (ante el Zaragoza empató en el 87′).

Llevaba tres jornadas de sequía el inglés y ya había ganas de verle de nuevo por estos lares. Ante el Burgos se desquitó con un gol y dos asistencias. En su tanto, la pelota pasó por debajo de las piernas de dos jugadores antes de entrar, pero cuando estás de dulce te sale todo.

Borja Van Bastón está imperial. No podemos definirlo de otra manera. El ariete hizo un doblete ante el Málaga (el segundo llegó en el 90′) y ya suma cinco goles en los últimos cuatro partidos. Ambos tantos llegaron con remates de cabeza.

El caro peaje de Fuenlabrada

El nueva camiseta del Girona trata de alargar al máximo la alegría obtenida en Fuenlabrada (1-2), pero el triunfo quizás le salió un tanto caro. Este jueves, el conjunto rojiblanco recibe al Alcorcón en Montilivi y Michel tendrá que reinventar a su equipo. Cinco jugadores sufrirán las consecuencias de lo vivido en el estadio Fernando Torres y serán baja. Samu Saiz, Jairo Izquierdo y Adrián Ortolá fueron expulsados y Borja García y Darío Sarmiento se lesionaron. Estos dos últimos se vieron obligados a pedir el cambio durante el duelo tras sufrir problemas musculares y los presagios no son del todo buenos.

Las bajas, sin duda, son un quebradero de cabeza para Michel porque, además, las ausencias de Jairo, Samu Saiz, Ortolá, Borja García y Darío Sarmiento se unen a las de los lesionados Pol Lozano y Óscar Ureña. Este último ya no pudo viajar a Fuenlabrada por culpa de una dolencia en el bíceps femoral de la pierna derecha y estará de dos a tres semanas de baja. Pero no todo es negativo. Nadie esconde que no poder contar con siete jugadores es un contratiempo considerable, pero también toca indicar que Michel parece que ha logrado que todos los jugadores de la plantilla crean en su estilo y el técnico atraviesa uno de sus mejores momentos en el Girona. El equipo ha sido capaz de sumar siete de los últimos nueve puntos en juego y las sensaciones, por fin, van acompañadas de resultados. Este jueves contra el Alcorcón, que ocupa puestos de descenso, el bloque gerundense tiene la oportunidad de seguir dando pasos de gigante hacia arriba en la clasificación.

En esta semana de jornada intersemanal no hay excesivo tiempo para recrearse y una de las mayores preocupaciones de Michel es recuperar físicamente a sus jugadores. El Alcorcón les espera y pese a que hay bajas, el técnico también sabe que recupera a Álex Baena, tras cumplir ciclo en Fuenlabrada. El jugador cedido por el Villarreal volverá a la titularidad.

El goal average, un ‘problema’ en la dura lucha por el playoff

En un final de Liga apretado, cuantos más detalles se tengan controlados y a favor, mejor. El Girona puede estar tranquilo con que, actualmente, la dinámica de resultados (ha sumado 19 de los últimos 24 puntos) y su posición en la tabla (sexto) le sonríen y permiten ocupar un puesto de playoff, pero hay un ‘problema’: llegar a la última jornada empatado a puntos con alguno de sus rivales directos le perjudicaría. La explicación es clara porque tiene el goal average en contra con Almería, Leganés, Sporting y Rayo. De ahí la importancia de seguir por la buena senda y evitar tropiezos que le hagan sacar la calculadora. Porque esta, en caso de empate a puntos, no le mostraría un resultado positivo.

El Girona está viviendo, pese a que ahora mismo está estable y eufórico, una temporada de altibajos y los momentos menos buenos del curso han coincidido con los tramos en los que se han enfrentado a los equipos que ahora son rivales directos. Es más, teniendo en cuenta los resultados ante Almería, Leganés, Sporting y Rayo Vallecano, los gerundenses tan sólo han festejado un triunfo en siete encuentros. Fue ante el Leganés (0-1), en el inicio de Liga. El resto de duelos se cuentan con desilusión porque en la segunda vuelta ante el conjunto pepinero, en Montilivi, cayeron 0-2 y el contra Almería (0-0 y 0-1) y Rayo (0-0 y 2-1) sólo fueron capaces de sumar un punto de seis posibles. Eso sí, aún hay tiempo de recortar terreno en esta lucha por el goal average porque el Sporting ha de visitar al Girona en Montilivi. Se trata de un duelo marcado en rojo por los rojiblancos porque los asturianos, quintos, tan sólo les aventajan en un punto. En la primera vuelta, los gerundenses cayeron 2-0 y ello le hace tener que remar mucho para darle la vuelta al goal average. Eso sí, tras el Girona-Sporting, tan sólo restarán tres partidos para el final de Liga y los gerundenses seguramente firmarían vencer y no tenerlo a favor.

Pese a que el goal average no sonría al Girona ante sus rivales directos en la lucha por el playoff, los rojiblancos saben que dependen de sí mismos para acabar el curso entre los seis mejores equipos de Segunda y disputar el playoff de ascenso. Actualmente son sextos, con un punto más que el Rayo, séptimo, y no dejan de mirar hacia arriba porque, por ejemplo, el Almería, tercero, lo vislumbran a cinco puntos. Restan cinco jornadas por disputarse y cada triunfo vale oro porque no sólo te acerca al objetivo, sino que suma presión a tus rivales directos. El Girona tiene claro su camino hacia el objetivo y este domingo sigue contra el Logroñés. El calendario del bloque rojiblanco no les dará un respiro porque después se enfrentarán a Sporting, Málaga, Alcorcón y acabarán la Liga en Cartagena. Toca remar para llegar vivo a tierra firme.

Sin la portería a cero, el Girona sólo gana el 17% de sus partidos

Ante la falta de pegada, el Girona lo fía todo a mantener su portería a cero. El problema viene cuando esto falla y el rival marca, como mínimo, un gol. Entonces parece que el castillo de naipes construido por Francisco se viene abajo y les cuesta en exceso sacar adelante los partidos. Los números así lo constan y es que, de los 28 encuentros disputados hasta la fecha, en tan sólo diez han dejado su meta a cero. O lo que es lo mismo, han acabado 18 partidos recibiendo, como mínimo, un tanto del rival. ¿Qué pasa entonces? Ganar pasa a ser casi misión imposible.

Si el Girona recibe un gol esta temporada le cuesta no sólo reponerse, sino también ganar. El dato es claro: si no dejan la portería a cero, sólo son capaces de ganar el 17 por ciento de los partidosEl balance en los 18 encuentros que han recibido gol este curso ha sido de diez derrotas, cinco empates y tres victorias. Estas últimas, la primera fue contra el Cartagena (1-2), después en Cornellà-El Prat ante el Espanyol (1-2) y, por último, el pasado 21 de febrero, contra el Castellón (2-1). 2021 no está siendo un buen año, de momento, para el Girona en el aspecto defensivo porque en los nueve encuentros disputados, sólo en uno (ante el Sabadell), se ha acabado imbatido.

Francisco tratará de volver a incidir en la importancia de mostrarse como un equipo fiable atrás porque por ahí es por donde pasan la mayoría de opciones de éxito del Girona esta campaña. Sumar únicamente 23 tantos en 28 partidos de Liga es un dato desalentador y más teniendo en cuenta que sólo Zaragoza (22), Logroñés (20), Alcorcón (20) y Albacete (18) han logrado menos. Datos que duelen al ver en la plantilla rojiblanca a jugadores como Cristhian Stuani, Mamadou Sylla y Samu Sáiz.

El Rayo deja con vida al Girona en un duelo vistoso, pero sin gol

El Rayo Vallecano dejó con vida al Girona y es que, pese a ser tremendamente superior en el inicio del partido, se olvidó de marcar en Montilivi. Los rojiblancos supieron aguantar el chaparrón y aunque mejoraron en la segunda mitad tampoco inquietaron en exceso a Luca Zidane. Pese a la ausencia de goles, el partido estuvo entretenido y deja a ambos conjuntos en una situación idéntica en la tabla con 28 puntos. Eso sí, son los rayistas, sextos, los que pisan los puestos de playoff de ascenso.

Que el partido finalizara 0-0 fue algo inimaginable porque si en los primeros ocho minutos, el Rayo Vallecano se hubiera colocado 0-3 en el marcador a nadie le habría sorprendido. Es más, hizo muchísimos méritos para ello. Atropelló al Girona porque a los 17 segundos, Calavera estuvo a punto de marcarse en propia puerta, el balón se topó con el palo, y Álvaro dispuso después de ocasiones tremendamente claras. La del minuto 9 obligó, especialmente, a Juan Carlos a vestirse de salvador porque el extremo rayista tiró casi a puerta vacía.

Este inicio cogió al equipo de Francisco a contrapié y no logró despertar hasta entrado el minuto 20. Hasta entonces tuvo que sufrir, y mucho, pero logró mantenerse, de milagro, intacto. Eso sí, pese a que el Rayo no pudo aguantar ese ritmo trepidante, Trejo siguió haciendo suyo el partido. El medio bailó a sus anchas y controló el tempo. El duelo estaba bonito, ágil y en el 30’ se vivió un intenso intercambio de golpes. Juan Carlos siguió desquiciando a Álvaro y Sylla logró pisar el área con insistencia. Samu Saiz también se dejó ver un poco y el Girona lo agradeció, aunque faltó acierto en los últimos metros.

Ya en la segunda mitad, las apariciones de Cristóforo y Yan Couto dieron oxígeno al Girona y fue a más. Controló la posesión y dispuso de buenas ocasiones. En el 54’, tras un gran centro de Yan Couto, Stuani, en una de las que no acostumbra a perdonar, cabeceó mal y el balón se marchó fuera. Y, en el 59’, tuvo que aparecer Luca para desviar un buen tiro de Monchu. Eso sí, el ritmo era muy distinto al de la primera mitad, más parsimonioso y con menos verticalidad, y con el paso de los minutos, el miedo a perder provocó que se tomaran muchos menos riesgos. El punto pareció contentar a ambos y así se firmó.

Escassi mete en la cabeza del Málaga el deseo de luchar por el playoff

EI Málaga vence y convence. El conjunto malaguista tuvo suficiente con un gol de cabeza de Escassi para superar a un Girona con muy poco fútbol y al que la dulce resaca de ganar al Espanyol no le sentó bien. Los rojiblancos se toparon con un muro en la segunda mitad y el sueño de luchar por el playoff se va a Málaga.

Pellicer, que dirigió a su equipo desde la grada por sanción, no apostó por salir con la defensa de tres centrales y sí con un 4-4-2, pero le costó arrancar. Es más, Mejías, una de las novedades visitantes, no tardó en darse cuenta de que no le esperaba un duelo sencillo porque, en el 2’, Sylla demostró ser más rápido y pillo que el central y lanzó un aviso. El problema, que la decisión final cuando estuvo dentro del área no fue la mejor y todo se quedó en casa. El susto sentó mejor al Málaga que al Girona y, a partir de entonces, los malaguistas se adueñaron de la posesión. A los gerundenses les costó encontrar entre líneas a Samu Saiz para tener mayor presencia en el área rival y, en defensa, no acabaron de cerrar bien a Cristian, Joaquín y Rahmani. Con el paso de los minutos, los visitantes olieron sangre y la recompensa al dominio llegó en el 33’. Fue a balón parado. Escassi ganó la posición a Bueno en un córner y, con un cabezazo cruzado, superó a Juan Carlos. El 0-1 fue un pullazo para el Girona y no quiso tardar en reaccionar. Es más, en el siguiente minuto pudo empatar, pero Dani Barrio emergió y desvió un buen tiro de Bárcenas.

En la primera mitad, el Girona no estuvo nada cómodo y le pasó factura no tener una circulación veloz y acertada del balón. Como sucedió en la jornada pasada ante el Espanyol, el conjunto gerundense lo fio todo a remontar. Pero esta vez salió cruz. Tuvo ocasiones para poder, como mínimo empatar, aunque faltó muchísimo acierto. Bárcenas y Monchu enviaron dos buenas ocasiones al limbo y al Málaga le bastó con sufrir y aguantar. Ni echó de menos que, en el 79’, Muñoz estrellara un balón en el larguero. El trabajo estaba hecho.

Narváez le salva la cabeza a Baraja

Dos goles del colombiano Juanjo Narváez en el descuento le dieron al Real Zaragoza un empate milagroso que salva momentáneamente la cabeza de Rubén Baraja. Durante casi todo el partido, el equipo aragonés estuvo a merced de un Girona que vino a La Romareda agotado y en cuadro, pero en el fútbol todo es posible en unos segundos y del 0-2 se pasó al 2-2 final que aplaza un partido más la toma de decisiones en el club aragonés, de por sí muy falto de resolución. Aunque con tres puntos de los últimos 18 no se puede seguir mirando a otro lado…

Baraja refrescó su once con James y Zanimmachia, en detrimento de Javi Ros y de Toro Fernández, y ordenó a su equipo en 4-4-1-1, con Bermejo de media punta por detrás de Narváez, mientras Francisco se presentó en La Romareda con ocho bajas, algunas tan relevantes como las de Samu Sáiz y Stuani, y apenas quince futbolistas de la primera plantilla, e hizo debutar con 20 años a Ramón Terrats, medio centro del filial.

El Zaragoza salió como un tiro y a los 45 segundos Bernardo tuvo que salvar bajo palos un remate de Zanimacchia, a centro de Chavarría, pero como a perro flaco todo son pulgas tres minutos después se lesionó Atienza, con un pinchazo en el muslo que le tendrá varias semanas de baja, y Baraja tuvo que echar mano del juvenil Francés, el único defensa que le quedaba en la convocatoria por las ausencias de Vigaray y Jair. Y mientras se volvía a ajustar la zaga estuvo a punto de sacar partido el Girona, en una acción que cocinó Sylla, muy activo, y no acertó a culminar Aday con todo su favor.

El partido fue adquiriendo un ritmo vertiginoso, de constante ida y vuelta, y Bermejo, el principal agitador del Zaragoza junto a Chavarría, dejó su sello con un impresionante zurdazo que se estrelló en el palo derecho de Juan Carlos. Corría el minuto 19 y el equipo aragonés disfrutaba de su segunda ocasión clara. Y ya se sabe que el que perdona en el fútbol lo suele pagar caro. Así que antes de la media hora, el Girona hizo diana en un centro desde la izquierda de Aday y un cabezazo de Sylla anticipándose a Guitián, despistadísimo en la marca. Cuarto gol del delantero senegalés, que está supliendo de forma excelente la lesión del artillero uruguayo Cristhian Stuani.

El 0-1 noqueó al Zaragoza y el Girona, sólido y combativo, ganó el descanso con una insultante comodidad.

La segunda parte ya fue coser y cantar para el equipo de Francisco, que pareció sentenciar enseguida el partido con otra brillantísima acción de Sylla, que desbordó como quiso a Guitián y le sirvió el 0-2 en el área chica a Valery, relevo de Aday tras el intermedio. Un gol que retrató la enorme debilidad defensiva del Zaragoza, pese a las frases vacías de Baraja sobre el orden y la seguridad de su equipo.

A la desesperada el todavía entrenador del Zaragoza dio entrada a Javi Ros y a Toro Fernández, que en su primera intervención peinó una falta a la cabeza del poste. La suerte le dio una vez más la espalda al Zaragoza, pero al final le alcanzó de lleno y de forma inesperada con dos goles de cabeza de Narváez en el descuento que aplazan una decisión drástica sobre Baraja.